0

River y el broche ideal para la mejor semana del año


Luego de ganarle a Boca y quedarse con la Supercopa, el Millo prolongó los festejos en la Superliga.
Del éxtasis al desencanto. De una sensación amarga que aflora en el Monumental a la explosión de felicidad. De esa fiesta con fuegos artificiales y Supercopa en mano a un empate inesperado. De maldecir por esa piedra celeste en el zapato que es Belgrano a dos goles de Ignacio Scocco -uno de ellos polémico- que le devuelven el alma al cuerpo. River viaja de un extremo a otro. Pero termina la mejor semana del año. Justo cuando se generaba una montaña de dudas antes del Superclásico, llegó el gol en contra de Patronato. Y el triunfo en Mendoza ante Boca y la estrella 63. Y esta victoria ante los cordobeses. Tres seguidas, casi un reflejo de los dorados tiempos del Muñeco.
Fue un cambio clave el ingreso de Scocco. Y aunque el partido pedía la salida de Lucas Pratto, sacrificado pero impreciso y poco contundente en relación a los millones invertidos por su pase, Marcelo Gallardo sacó a Rodrigo Mora. Y el Nacho goleador pegó los dos gritos necesarios en el momento en el que había crecido Belgrano. ¿Qué hubiera pasado si Diego Abal cobraba infracción del santafesino sobre Marcelo Benítez en la jugada que terminó en el 2 a 1? La pregunta nunca tendrá respuesta. La única certeza es que River dormirá tranquilo en la fecha FIFA, con las esperanzas renovadas.
Con el impulso de la celebración previa al partido, del "dale campeón" y "es para vos, bostero..." salió a jugar River un duelo siempre espinoso contra Belgrano. Por el pasado fundamentalmente, existe una indisimulable pica con el equipo cordobés, que en el primer tiempo estuvo lejos de complicarle la vida. Por el contrario, como si se tratara de una ofrenda, se sumó a los festejos con un obsequio. Apretado contra el lateral, Erik Godoy eligió despejar de zurda y hacia adentro. Pity Martínez recuperó la pelota, avanzó unos metros, enganchó y le rompió el arco a Lucas Acosta.
A contramano de las dificultades que se le habían presentado desde la reanudación de la Superliga, River se encontró rápidamente en ventaja. Se sacó el peso del resultado de encima y fue por más. Con un mediocampo que tuvo la pelota, que la hizo circular con criterio desde los pies de Leo Ponzio hasta Pratto. Activo, pero irregular Enzo Pérez, conectaron bien Pity y Nacho Fernández, fue movedizo Rodrigo Mora y estuvieron punzantes los laterales, especialmente Marcelo Saracchi. Todas resultaron señales de un equipo energizado por la victoria del miércoles al que le quedó demasiado corto el marcador.
Sí, mereció un gol más River en esa primera etapa. Estuvo cerca de lograrlo en ese tiro libre de Nacho Fernández que se perdió a centímetros del travesaño. O en ese disparo cruzado de Pratto que tapó Acosta, redimiéndose de un error en la salida. O en esa jugada bárbara que armaron Pity y Mora y que Nacho definió mal, solo de frente al arco.
Y con esa tónica arrancó el complemento. Pero Belgrano evolucionó. Pablo Lavallén sacó a Fabricio, metió a Jonás Aguirre, modificó el 4-4-2 por un 4-2-3-1 más picante y buscó lastimar por izquierda, a espaldas de Nacho, de frente a Mayada. Y por ahí se filtró Benítez, que sacó un zapatazo. Armani dio un rebote inadmisible y Epifanio García la empujó al empate. El héroe de Mendoza falló en casa y los fantasmas del pasado sobrevolaron Udaondo y Figueroa Alcorta.
Belgrano se envalentonó. Ortiz asustó con un tiro de media distancia y Armani se recompuso ante Suárez. Gallardo movió el banco. Apostó al colombiano Quintero para recuperar el volumen de juego del primer tiempo. Pero fue Scocco el hombre clave. El que revivió a River con sus dos goles. El que le dio continuidad a esa fiesta Monumental que comenzó al pie de la Cordillera.

0

Jugador por Jugador contra Belgrano en el Monumental


El puntaje de cada jugador de River Plate según el rendimiento que tuvo en el encuentro ante Belgrano de Córdoba, correspondiente a la vigésima fecha de la Superliga Argentina 2017-2018.








Franco Armani (5): Fue el autor de un par de buenas intervenciones, pero también fue responsable directo del empate parcial de Belgrano, con un rebote corto.

Camilo Mayada (6): Bien proyectándose y participando en la jugada del segundo gol de River. Por el contrario, tuvo complicaciones en el retroceso y la marca.

Jonatan Maidana (6,5): Fue el hombre más firme de la defensa, imponiéndose en el mano a mano y en el juego aéreo. Acertado con los cruces.

Javier Pinola (5): Sigue sin transmitir seguridad y firmeza. Perdió a Epifanio García en más de una oportunidad.

Marcelo Saracchi (5): Continúa en un nivel bajo. Lo sobrepasaron con facilidad, dejó mucho espacio a su espalda, y, pese a su velocidad, resolvió siempre mal en ataque.

Ignacio Fernández (6): Por momentos manejó la pelota con criterio y formó sociedades interesantes, pero le faltó continuidad en su juego. Erró un gol increíble de frente al arco.

Enzo Pérez (5): Voluntad, sacrificio y no mucho más. No logra encontrar claridad y toma decisiones equivocadas repetidamente. Poco en el retroceso.

Leonardo Ponzio (6): No cometió errores groseros y aportó un buen despliegue, pero no estuvo del todo firme en la recuperación y tuvo fallas repetidas de desplazamiento y ubicación.

Gonzalo Martínez (7): Nuevamente determinante. Abrió el partido con un golazo, y, pese a cometer errores en los metros finales, llevó peligro hacia el arco rival de forma constante.

Rodrigo Mora (6): Sacrificio incesante en todo el frente de ataque, aunque con escasa claridad en los metros finales.

Lucas Pratto (5): Voluntad permanente, pero demasiadas fallas a la hora de las resoluciones. Se lo nota demasiado lento y pesado.

Ingresaron:

Juan Quintero (6): Algo intermitente, pero aportó un par de envíos largos interesantes.

gnacio Scocco (8): Entró y fue absolutamente determinante para River marcando dos goles producto de dos buenas definiciones.

Nicolás De la Cruz (-): Escasos minutos en el campo de juego.

0

Súper Scocco


Nacho sigue afiladísimo: entró en el segundo tiempo y, con dos tantos, le dio el triunfo a River por 3-1 frente a Belgrano. El Monumental fue una fiesta tras la victoria ante Boca. 
El Monumental fue una fiesta. La gente copó el estadio tras la victoria frente a Boca. Los jugadores y Gallardo se llevaron una merecida ovación antes, durante y después, pero el gran protagonista de la noche del domingo ante Belgrano fue Nacho Scocco. Como el pasado miércoles, el 32 ingresó en el segundo tiempo y fue clave para darle el triunfo al Millo por 3-1. Tercera victoria consecutiva en una semana bárbara para la Banda. Ah, se pone en carrera para ingresar a la zona de Copa Sudamericana.
Con confianza, River tuvo un buen primer tiempo. A diferencia de otros partidos en este año, los jugadores se mostraron activos, manejando bien la pelota y siendo profundos. Le faltó precisión -situaciones tuvo- para aumentar la ventaja de 1-0, conseguida en apenas dos minutos por un error en la salida del team cordobés y la capacidad de Pity Martínez para aprovechar el regalo. El Pirata tuvo apenas una bien nítida, pero se la anularon por muy fino offside.
En el segundo tiempo se vieron algunos vicios del Millo de Galllardo. Porque perdió la pelota y dejó venir a Belgrano, que lo empató mediante Epifanio García tras un rebote inapropiado de Armani. Sí, justo cuando venía de ser figura en el clásico. A partir de eso, el partido se hizo de ida y vuelta. Porque River ya no era dominador, pero seguía llegando. Y el Pirata también se animaba.
Hasta que apareció en escena el hombre de la noche: Scocco. Primero, con un remate de derecha tras pase de Mayada (Belgrano reclamó falta en el inicio de la jugada). Así, se vengó de la que le había tapado Acosta apenas había ingresado a la cancha. Y, cerca del final, Nacho manejó bien una contra y lo cerró. 
Con este resultado, River suma 26 puntos en la Superliga (segunda victoria consecutiva) y sube en la tabla, tratando de dar lucha en el ingreso a la zona de Copa Sudamericana. Así, tuvo un Súper domingo. Un domingo Scocopadísimo.


0

Monumental de Fiesta!


La Subcomisión del Hincha de River preparó un recibimiento acorde al Supercampeón para el duelo de esta tarde ante Belgrano, por la vigésima fecha del torneo. ¡A copar el templo sagrado!
La Banda viene de conseguir un título nada menos que frente al eterno rival. El miércoles pasado, le ganó 2-0 en el estadio Malvinas Argentinas (Mendoza) y todo Núñez gozó la conquista a lo largo del país y en distintos rincones del planeta.
Pero la fiesta sigue, señoras y señores. Es que hoy, cuando el Millonario reciba a Belgrano desde las 20 horas, habrá un recibimiento sensacional para el equipo comandado por Marcelo Gallardo. Así lo dio a conocer la Subcomisión del Hincha de River.
En declaraciones con La Página Millonaria, la Subcomisión del Hincha debió improvisar para esta bienvenida, teniendo en cuenta que también tuvieron que planificar la fiesta de Mendoza, que tuvo lugar hace tan sólo cinco días. Anticiparon que cortaron un rollo de más de 2.000 metros para vestir una de las tribunas del Antonio Vespucio Liberti y también afirmaron que están "eternamente agradecidos a Gallardo y a todo el plantel".


0

11 para la ovación


Luego de ganarle la final a Boca, el ingreso de Mayada por el lesionado Montiel sería el único cambio en River para recibir a Belgrano. La fiesta sigue el domingo en un Monumental colmado.
Las mieles del triunfo del miércoles en Mendoza contra Boca todavía endulzan los corazones de los hinchas de River, que este domingo colmarán el Monumental -durante todo el sábado hubo largas colas para retirar entradas- para extender la fiesta que arrancó en el Malvinas Argentinas. Con respecto al Súper, Marcelo Gallardo haría un solo cambio, obligado, para que la gente reconozca a su equipo, que saldrá al campo de juego con la Supercopa.
Si bien en la práctica vespertina Gallardo no paró un equipo, la única modificación tiene que ver con la lesión de Gonzalo Montiel, quien en Mendoza salió reemplazado. En su lugar ingresó Camilo Mayada, el mismo que estará en el lateral derecho frente al Pirata. El resto es un calco del team que le ganó a Boca.
Así va River: Armani; Mayada, Maidana, Pinola, Saracchi; Nacho Fernández, Ponzio, Enzo Pérez, Pity Martínez; Mora y Pratto.


0

Las alternativas en la formación de River contra Belgrano


Si bien todavía no está confirmado, La Banda realizaría varios cambios respecto al último partido disputado ante Boca en la Supercopa. Mayada reemplazaría al lesionado Montiel, Martínez Quarta iría por Maidana y, arriba, Scocco volvería al once inicial. Mirá.
Parece un rompecabezas. Y aunque no lo es, la realidad indica que habría varios cambios para enfrentarse a Belgrano. Tras la algarabía de la Supercopa Argentina, River debe volver a mentalizarse en la Superliga y deberá ganar los tres puntos este domingo a las 20 horas en el estadio Monumental.
Para ello, en la mente de Gallardo estaría la posibilidad de que Maidana descanse en el banco y su lugar sea ocupado por Martínez Quarta (y lo propio pasaría arriba, con Mora y Nacho Scocco). A su vez, Mayada reemplazaría al lesionado Montiel.
En el medio estaría el sector con más dudas: Quintero podría jugar desde el arranque, Zuculini estaría como ladero de Ponzio en el doble cinco y Nacho Fernández sería quién más chances de jugar tenga por sobre encima de (por ejemplo) Enzo Pérez.
Pasando en limpio, estos son los dos equipos posibles para recibir a Belgrano:

+ Equipo 1:



+ Equipo 2:




0

Los elegidos del Muñeco


Gallardo entregó la nómina de futbolistas para recibir este domingo a Belgrano. De la Cruz entró en la lista en lugar del lesionado Montiel.
Luego de la épica victoria en la Supercopa, Marcelo Gallardo quiere sumar una nueva victoria este domingo cuando River reciba desde las 20 a Belgrano en Córdoba. El técnico apuesta a lo mejor que tiene para jugar ante el Pirata. Este viernes entregó la nómina de citados. La única modificación en la lista con respecto al Superclásico es el ingreso de Nicolás de la Cruz -iría al banco- en lugar de Gonzalo Montiel, quien sufrió una distensión en el recto de la pierna derecha. 
La idea del cuerpo técnico es repetir el mismo once que enfrentó al Xeneize. Pero ante la ausencia de Montiel, el lateral derecha será Camilo Mayada.
¿Cuál será el once del Millo para jugar ante Belgrano?
Armani;
Mayada, Maidana, Pinola, Saracchi;
Nacho Fernández, Ponzio, Enzo Pérez, Pity Martínez;
Rodrigo Mora y Lucas Pratto.



0

River le gano a Boca en el juego y en una arbitraje plenamente tendencioso


El Más Grande se impuso en el juego y ante varias sanciones del árbitro encargado del partido que no han sido contundentes.
Más allá de la victoria, River se impuso ante otro rival que no estaba pensado: el árbitro. Es que La Banda sufrió varias infracciones que no terminaron de ser contundentes. A saber: ha sancionado faltas que fueron inexistentes y condicionó al equipo de Gallardo amonestando (casi) de entrada a Leonardo Ponzio.
EL PENAL QUE COBRÓ A FAVOR DE RIVER FUE CLARAMENTE FALTA Y A LOUSTAU NO LE QUEDÓ OTRA QUE SANCIONARLO
De todas maneras, el equipo de Gallardo estuvo con la guardia alta y se impuso ante un rival que contó con varias intervenciones desafortunadas (para River, claro).

0

Tremendo lo de Armani


El arquero de River sostuvo a su equipo en el arranque del complemento con cinco grandes intervenciones. Un par de manotazos que se metían, una salida como líbero y un doble mano a mano.
Después de mucho tiempo, desde la partida de Barovero para ser exactos, River no tenía un arquero que entregara tanta seguridad como la que ofrece Franco Armani. En el arranque del segundo tiempo de la Supercopa en Mendoza, el 1 millonario sostuvo la ventaja de su equipo con cinco intervenciones totalmente determinantes.
Primero sacó por arriba del travesaño dos manotazos bárbaros que se le metían, contra Pavón y Cardona. Después, salió como líbero para cortar una jugada en la que Pavón picaba con los cubiertos preparados. Y como si fuera poco, en la previa del 2-0 de Scocco, tuvo una doble tapada mano a mano espectacular contra Fabra y Nández. ¡Qué arquerazo!

0

"Saldamos otro pagaré"


Gallardo sacó chapa tras una nueva victoria clásica de River en un mano a mano. "Estos partidos se juegan y se ganan de la manera que se hizo".
Marcelo Gallardo, eufórico como pocas veces, salió a dar su conferencia de prensa con una sonrisa dibujada en la cara y desplegó su chapa por todo el auditorio. Claro, desde que él llegó a River la historia de los superclásicos cambió para siempre: es la tercera vez que elimina al rival de toda la vida en duelos mano a mano y, de yapa, esta vez festejó un título."Saldamos otro pagaré (haciendo referencia a la única definición previa en la historia entre River y Boca, en 1976). Esto gana que se tenga respeto a la institución. Esperábamos tener una buena zanahoria por comer. Hoy lo demostramos. Mientras tanto tuvimos que vivir momentos de incertidumbre, no es un desahogo, es para que entiendan que cuando este equipo tiene un desafío importante por delante siempre estuvimos a la altura".
Y siguió Gallardo: "Hicimos un partido muy inteligente, perfectamente como había que jugarlo, hubo determinación, coraje, y estuvimos efectivos para ganar el partido. Hay un sentimiento único que hace que estos partidos se jueguen y se ganen de la manera que se hizo. Como parte de este equipo que tuvo que pasar por momentos difíciles, este era un partido especial, por el valor, por la carga emocional tenés que saber jugarlos, y este equipo dio muestra de que sabe hacerlo. A Boca siempre le costó jugar contra nosotros".
El Muñeco reconoció que, por lo que se vivía en la previa, "el candidato era Boca, pero yo sabía que ellos sabían que no eran favoritos, que les iba a costar. Desde ese lugar planteamos el partido. Es un momento esperado por los futbolistas, era el partido más esperado del semestre. Sé que el hincha lo valora. Después de dos meses de mal juego y malos resultados, acompañó, siguió apoyando, sabiendo que esta zanahoria la teníamos ahí nomás. Les agradezco por haber bancado en los malos momentos, hoy están felices como nosotros".
Finalmente, Gallardo consideró que todo lo que se armó en la previa pudo jugarle en contra a River hasta ahora. "Estaba esperando este partido desde hace mucho tiempo. Sabíamos que era importante, pero todos lo vienen jugando hace mucho. Eso lleva mucha carga y después tenés que jugarlo. Cuando pasa eso, a veces no tenés paz. Se ganaron jugar este partido y hoy se ganaron nuevamente el respeto y el reconocimiento de todos".

Más frases de Gallardo:

"Agradecer a la provincia de Mendoza, me encanta y me sienta bien. Netamente riverplatense".

"No dejamos crecer a Boca en su juego, llegamos al gol, pasamos algunos contratiempos en el ST pero lo superamos con tranquilidad, más allá de que Boca necesitaba el empate".

"Tengo que sincerarme. En estos dos meses que venimos jugando muy mal, sabíamos cómo jugaba Boca, pero ellos no tenían ni idea de cómo íbamos a jugar este partido. Sufrimos, fuimos cuestionados merecidamente, pero hoy tenemos una alegría enorme a nosotros mismos y a la gente".

"Esconder estos dos meses de malos funcionamientos para ganar hoy de la manera en que ganamos , esa fue la estrategia".

0

Jugador por Jugador en la Superfinal Contra Boca


El puntaje de cada jugador de River Plate según el rendimiento que tuvo en el encuentro ante Boca Juniors, correspondiente a la Supercopa Argentina 2017.









Franco Armani (9): Con varias tapadas fenomenales fue absolutamente determinante para la victoria de River. Transmitió seguridad y personalidad en todo momento.

Gonzalo Montiel (6): Sufrió en el primer tramo del juego con Pavón, pero fue ajustando marca, posición y movimientos. No cometió errores graves.

Jonatan Maidana (7): Otro buen partido del primer marcador central, que fue una garantía en los mano a mano y se mostró firme en el juego aéreo. Bien en los cruces y en las salidas.

Javier Pinola (5): Tuvo varias complicaciones en los cierres y algunas fallas en las salidas con la pelota. No fue autor de errores groseros, pero no impuso presencia en ningún momento.

Marcelo Saracchi (5): Apático rendimiento del uruguayo, que no se mostró seguro en el retroceso, no fue preciso con la pelota y y no gravitó con sus proyecciones.

Ignacio Fernández (7,5): Se hizo dueño de la pelota y la manejó con criterio prácticamente siempre. Muy claro e incisivo, decidiendo y ejecutando bien. Clave en ambos goles.

Leonardo Ponzio (6,5): Mucha personalidad, gran despliegue de principio a fin y aceptable en la distribución. Le faltó ajustar la ubicación en algunos pasajes.

Enzo Pérez (6): Nuevamente ofreció sacrificio y despliegue, pero no tomó buenas decisiones con la pelota en los pies y no estuvo demasiado firme en la contención.

Gonzalo Martínez (8): Fue el hombre más peligroso de River apoyado en su desequilibrio individual y su cambio de ritmo constante. Totalmente determinante en ambas anotaciones.

Rodrigo Mora (6,5): Voluntarioso y sacrificado, peleando cada pelota como si fuese la última. Luego de un buen primer tiempo, se fue diluyendo en la segunda parte.

Lucas Pratto (6): Se movió por todo el frente de ataque y le tocó hacer el trabajo sucio peleando con la defensa rival. No logró generarse espacios ni desequilibrar.

Ingresaron:

Camilo Mayada (6): Logró controlar bastante bien los avances por su sector.

Bruno Zuculini (6): Mantuvo el orden y no desentonó con la pelota.

Ignacio Scocco (7,5): Entró y en la primera que tocó definió de gran manera para liquidar el partido.

0

¡Salud al Campeón más poderoso de la historia!


River jugó un partido muy inteligente, mostró que mantiene la chapa copera y, gracias a otro gran planteo de Gallardo, se impuso 2-0 sobre Boca para quedarse con la Supercopa Argentina en el duelo de campeones.
Es una de las mayores alegrías de la historia. Contra todo un aparato y contra los pronósticos, River venció al equipo que ganará el torneo local muchas fechas antes y que lo cambiaría todo por estar en el lugar del Millonario, celebrando después de un Superclásico, de otro mano a mano exitoso y sintiendo esa felicidad gigante que representa ser El Campeón más poderoso de la historia, el ganador de otro duelo cara a cara, como ocurrió en los años 2014 y 2015.
River ganó porque fue superior a nivel táctico y entendió desde siempre cuál era la actitud que se necesitaba en esta final única, soñada por todos los fanáticos de La Banda. Marcelo Daniel Gallardo otra vez dejó en claro que es el Napoleón del fútbol sudamericano, el estratega número 1, el hombre que fue crack como jugador y es todavía mejor como DT, lo que es mucho decir. Esta vez diseñó un 4-3-1-2 inesperado, con Gonzalo Martínez -¿aún existe alguien capaz de discutirlo?- como enganche y principal figura desequilibrante. Lejos de sentir nervios, cambió penal por gol luego de una falta sobre Ignacio Fernández, otro que la rompió. Como si fuera poco, el Pity también asistió al ingresado Ignacio Scocco en el 2-0 definitivo.
El Más Grande anuló a Boca otra vez en un choque a todo o nada. Le ganó otra llave de colección con el Muñeco como técnico. Es tan apabullante la diferencia estratégica que en los cinco partidos coperos el eterno rival ni siquiera pudo hacer un gol. Eso se debe en el caso de esta noche a un Franco Armani descomunal, fuera de serie, capaz de atajar un remate a la velocidad de la luz. Fue determinante para sostener la ventaja en el momento crítico donde el arbitraje de Patricio Loustau dejó mucho que desear en varios fallos de llamativo criterio.
Sin embargo, la defensa y los volantes también resultaron fundamentales porque todos se comprometieron con la recuperación, haciendo esfuerzos conmovedores, corriendo como si hubiera que alcanzar el objeto de mayor valor en el mundo. Hubo mucha lectura de las circunstancias. River supo cuándo presionar, en qué zona apretar, cuál era el lugar indicado en el que había que esperar y replegarse. Tácticamenge hizo un partido brillante, digno de la capacidad del Muñeco. Los jugadores, tantas veces en bajo nivel, exprimieron hasta la última gota de sudor para conseguir la tan anhelada Supercopa Argentina. Cada vez que un compañero aguantaba en el cara a cara ante un adversario, llegaban uno o dos para que la cacería sea letal. Así una y otra vez, desmoralizando cada intento de un oponente.
La practicidad también fue clave. River pocas veces cometió errores en la salida o en un rincón del césped. Supo cuándo podía arriesgar y cuándo había que rechazar la pelota. Nadie quedó en deuda. Cada jugador del Millonario comprendió que el compromiso individual era indispensable para el bienestar colectivo. Los cambios de Gallardo hicieron su aporte y, arriba, cada atacante fue el primer defensor para incomodar el circuito futbolístico de un Boca que se derrumbó anímicamente y jamás le encontró la vuelta al desarrollo. El Más Grande triunfó en otro mano a mano para la historia, dio una clase de cómo afrontar este tipo de partidos y se quedó con la Supercopa Argentina que se le había negado. ¡Salud al Campeón más poderoso de la historia!

0

Locura por River!

Cerca de 1500 personas coparon la llegada del Millo a Mendoza. Los jugadores firmaron autógrafos y se sacaron fotos con los hinchas. "Es impresionante", expresó Gallardo en el arribo. 
Locura por River. El Millo revolucionó Mendoza en su llegada. Porque cerca de 1500 personas se agruparon en las inmediaciones del Hotel Diplomatic para recibir al equipo de Marcelo Gallardo pasadas las 21.
Banderas, hinchas con las camisetas. Cantitos. Como si estuvieran en pleno estadio Malvinas Argentinas. Los jugadores bajaron del micro, se sacaron fotos con los fanáticos y hasta entregaron estampitas firmadas con sus nombres. "Esto es impresionante. No se puede creer", llegó a decir Marcelo Gallardo, feliz por el recibimiento.
Flashes por acá, por allá. Mora, Ponzio, Maidana, Pratto y todos los jugadores predispuestos a la hora de fotografiarse con los simpatizantes. Un recuerdo inolvidable. Un recibimiento único de cara al Súper



0

Una sorpresa en la formacion inicial de River


Gallardo decidió que Maidana tenga como compañero de la zaga a Pinola, desplazando inesperadamente a Martínez Quarta.
A pocas horas para la histórica final entre River y Boca, por la Supercopa Argentina, existe una sorpresa en la posible formación. Es que Marcelo Gallardo utilizará a su dupla central de mayor experiencia, es decir que Jonatan Maidana y Javier Pinola conformarán la voz de mando en la zaga. De esa manera, Lucas Martínez Quarta ocuparía un lugar en el banco de suplentes esta noche en el estadio Malvinas Argentinas.
Si bien el equipo inicial no está confirmado públicamente, es muy posible que el Muñeco disponga un 4-4-2 de medio campo mixto en cuanto a características de juego, apelando tanto a la elaboración como la capacidad de recuperación. Por eso, además de Leonardo Ponzio, Enzo Pérez estaría en la zona central, mientras que Ignacio Fernández y Gonzalo Martínez ocuparían los sectores derecho e izquierdo, respectivamente.
Desde luego que Franco Armani custodiará el arco, los laterales serían terreno de Gonzalo Montiel y Marcelo Saracchi, en tanto que la fórmula ofensiva se perfila con Rodrigo Mora y Lucas Pratto. Sin embargo, la realidad indica que la formación recién se sabrá una vez que la planilla oficial de River esté pegada a pocos metros del vestuario designado en el Mundialista, donde el Superclásico se jugará desde las 21.10, con arbitraje de Patricio Loustau.


0

Dia de decisiones se entrena en Cardales


El plantel se entrenará desde las 10.30 en una de las canchas del Sofitel. Allí Gallardo ensayará con un equipo pensando en el partido de este miércoles frente a Boca, en Mendoza.
Tan sólo falta un día para el encuentro histórico entre River y Boca por la Supercopa Argentina. La ansiedad crece minuto tras minuto, pero los jugadores permanecen alejados de toda la efervescencia que puede haber en el estadio Monumental, las calles e incluso cada salida del predio de Ezeiza. Una vez más, el búnker elegido por Marcelo Gallardo es el Sofitel de Cardales.
Al igual que sucedió antes de las semifinales contra Guaraní en el año 2015, la revancha inolvidable frente a Jorge Wilstermann y el encuentro de ida ante Lanús, la reserva ubicada a unos 60 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires sirve como refugio al ruido y la ansiedad que necesitan evitar los futbolistas. Mientras ayer por la tarde hubo ejercicios sin indicios de la formación, esta mañana es muy probable que el Muñeco dé pistas en un ensayo táctico.
Tras la práctica que comenzará a las 10.30, el plantel almorzará en el predio situado en el partido de Campana, provincia de Buenos Aires. Después habrá siesta y, a las 19 horas, el vuelo chárter desde el Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery con destino a Mendoza. Allí los 28 jugadores del grupo se alojarán en el estadio Diplomatic.

0

¿Un súper adiós?


El Pity Martínez volvería a ser titular y River necesita de su mejor versión en el que podría ser su último partido contra Boca.
De la insistencia de Gallardo a los cuatro millones de dólares para contratarlo en el verano del 2015. De un promisorio comienzo a una lesión que le cortó el envión. De los primeros murmullos a quedar en la foto del campeón de América en un papel secundario. De pedirles silencio a los hinchas tras un gol a Quilmes a estar cerca de embocar al Barcelona en la final del Mundial de Clubes. De una jugada eléctrica y decisiva a decisiones erráticas. De un 3 en su primer clásico oficial a un 9 en el último en la Bombonera de acuerdo a los puntajes de Olé...
Gonzalo Martínez es así y River lo necesita de cara a lo que puede ser el último superclásico del hombre que lleva la 10 desde hace poco más de tres años.
Después de esa lesión muscular llamada oficialmente “distensión” pero que apestó de aroma a desgarro porque lo dejó tres semanas sin jugar, el Pity sumó minutos contra Patronato (entró a los 33 del segundo tiempo) y evidenció una lógica en estos casos: la falta de ritmo de juego. Pero el gris momento del equipo y la  magnitud de una final contra Boca potencian la importancia de su presencia.
A partir de su juego vertical y cambio de ritmo, el Pity ofrece una variante que no abunda en el plantel (el uruguayo De la Cruz puede acercar esas características y de hecho lo reemplazó durante su ausencia). Y también dispone de recorrido en clásicos: disputó ocho oficiales entre torneos locales y copas, con dos momentos por los que quedó en la retina de los hinchas. Primero en la ida por la Libertadores 2015, ingresó por Driussi, aportó desparpajo en medio de tanta tensión y provocó el penal de Marín que metió Carlos Sánchez. Después, en mayo del año pasado, fue un martirio para Peruzzi, hizo un golazo para el 1-0, asistió a Alario en el 2-0 y aunque salió a los 20 de la parte final, fue la gran figura de la tarde de aquel 3-1 en territorio visitante. Y la yapa: también fue el mejor de la cancha en el último cruce, el 1-0 en Mar del Plata con gol de Borré.
Y aunque Gallardo mantiene el hermetismo público en cuanto a la formación, el 10 tiene todos los boletos para ser titular mañana a la noche. Probablemente como volante por la izquierda, como de costumbre, tal vez parta desde la derecha para atosigar a Fabra o ser una especie de enganche a espaldas de Barrios son las opciones estratégicas para un partido especial. Tanto que podría ser el del adiós en choques con Boca. El interés del Sporting de Lisboa se mantiene latente y el Pity es el hombre a vender en el largo mercado de pases que se viene por el Mundial: los gastos que hizo River últimamente lo obligan a una venta que intente equilibrar los números... ¿Será una súper despedida, entonces?

0

Esto es River


River, de callado: al revés que en Boca, nadie habló. Con el apoyo de los hinchas, se aisló y armó un 11 que incluiría de arranque a Nacho Fernández.
El título de esta nota no está entrecomillado como el de la contra porque, justamente, esto es River. Esto: no salir a hablar, aislarse en el hermetismo y la cautela antes de un partido como el de mañana. Jugarla de callado, a cara de perro, sin contacto con los medios. Sin contacto con nadie salvo con un grupito de hinchas que se infiltraron para hacer el aguante y bancaron la parada, que confían en el aura del deté y de sus jugadores. Después, ni fotos oficiales hay de la concentración de River en el Sofitel de Cardales: el plantel de Gallardo se encerró en su búnker para preparar esta final contra Boca. El plantel entero, el cuerpo técnico, D’Onofrio (que estuvo ayer en la práctica) y nadie más. Esto es River. Un equipo que todavía no es equipo en lo que va de 2018. Aunque el Muñeco ya parece tener a los 11: ayer, en un ejercicio táctico del que participaron 13 futbolistas, paró una formación que incluyó a Nacho Fernández en el medio y en la que el Pity Martínez alternó con Quintero y Mora, con Scocco. River es un equipo que no tiene hoy casi ningún titular indiscutido. Pero un equipo que, con el Muñeco al mando, casi siempre estuvo a la altura de los grandes desafíos, y por eso la bandera que ilustra esta nota. Un equipo que se suele hacer fuerte en los escenarios más jodidos. Y éste sin dudas es uno de ellos. Una final contra Boca, contra el Boca puntero, contra el Boca todopoderoso, contra el Boca de Angelici y de Tapia y de Macri y de los amigos de Macri como Tevez y Guillermo y de la AFA y del Gobierno y del Tribunal de Disciplina y de la Selección y del Poder Judicial y de la Secretaría de Deportes y de la CIA y el FBI tal vez también. Una final contra este Frankenstein de poder que es Boca y en este momento de River, acaso el peor, casualmente, desde que Gallardo es su entrenador. Sin juego, sin fuego sagrado desde aquella traumática eliminación ante Lanús y, por si faltaba algo, perjudicado por los arbitrajes más de una vez en los últimos tiempos.
Pero el contexto tiene puntos de contacto con otros. Antes de la semifinal de vuelta de la Sudamericana contra Boca, River llegaba golpeado por una racha de empates y derrotas que lo dejó prácticamente afuera de un torneo local que parecía tener en el bolsillo. Antes de los octavos de la Libertadores contra Boca, venía de perder en una semana la Supercopa Argentina con Huracán y el superclásico de la liga, había clasificado por la ventana en la fase de grupos de la Copa y enfrentaba al clásico rival, que había sacado puntaje ideal y récord.
Esta vez, los contrastes se ven aún más intensos. Y aunque el título en disputa sea de un valor muy menor al de esas dos copas internacionales que River ganó luego de eliminar a los primos en cuestión de seis meses, el partido representa mucho. Porque es un clásico, porque -bien o mal- es una final por un trofeo oficial y es una situación que sólo ocurrió una vez en la historia, porque River necesita como el agua un triunfo “crucial”, como dijo el propio Eme Ge, para salir del pozo a tiempo, para usar la Supercopa de trampolín para encarar el final de la Superliga y, sobre todo, la zona de grupos de la Copa, para darle una alegría a la gente en medio de la malaria. Para eso, debe salir a jugar con la sangre en el ojo.
Hoy, tras otro entrenamiento en el silencio de Cardales, volará a Mendoza y será recibido por una multitud, como sucede en cada provincia a la que va en general y en la tierra del buen vino en particular. Los hinchas de River esperan eso. Una alegría al fin, levantar la cabeza de una buena vez y volver a ver a un equipo con la mística copera que tuvieron siempre los equipos de Gallardo en las finales.
¿Saldrá así? Gallardo probó con Franco Armani; Gonzalo Montiel, Jonatan Maidana, Lucas Martínez Quarta y Marcelo Saracchi; Ignacio Fernández, Enzo Pérez, Leonardo Ponzio y Gonzalo Martínez o Juan Fernando Quintero; Lucas Pratto y Rodrigo Mora o Ignacio Scocco.




0

Comenzando la semana a pleno


El plantel de River se reencontrará este mediodía en el Monumental y luego se dirigirá al Sofitel de Cardales, donde se entrenará por la tarde y quedará concentrado para la final ante Boca. El martes, a las 19 horas, viajará a Mendoza.
La Banda está a tan sólo unos días de jugar un encuentro decisivo frente al eterno rival. Este miércoles, desde las 21.10 horas, disputará la final de la Supercopa Argentina en el estadio Malvinas Argentinas.
Si bien el equipo de Marcelo Gallardo viene de ganarle 1-0 a Patronato, lo cierto es que deberá mejorar muchísimo. Y los días previos al partido serán fundamentales para que el Muñeco pueda fijar una idea de cara al encuentro.
Hoy al mediodía, los 28 jugadores del plantel del Más Grande se reencontrará en el Monumental y luego se dirigirá al Sofitel de Cardales para entrenarse a las 18 horas y quedar concentrado de cara al partido frente a Boca.
El equipo pasará esta noche en Cardales y el martes, a partir de las 19 horas, viajará en vuelo chárter rumbo a Mendoza, donde se alojarán en el hotel Diplomatic. ¡Vamos todos unidos!

0

Un Súper rompecabezas


River volvió de Paraná y se entrenó en el Monumental durante el domingo. Gallardo ya piensa en el armado del once para jugar contra Boca. Hoy hay varias incógnitas. 
Sin tiempo para perder, River volvió rápido de Paraná y este domingo se entrenó a puertas cerradas en el Monumental, ya pensando en lo que será el clásico del miércoles ante Boca en Mendoza. Marcelo Gallardo debe empezar a planificar el once que meterá de entrada. Hoy hay varias dudas.
En el arco, Franco Armani es inamovible. En la defensa, Jonatan Maidana asoma como fija luego de un buen partido frente a Patronato y estaría secundado por Lucas Martínez Quarta, que descansó este fin de semana. ¿Los laterales? Gonzalo Montiel, suplente en Paraná, le ganaría la pulseada a Camilo Mayada,que el sábado no terminó de aprovechar la oportunidad. Por el izquierdo, Marcelo Saracchi, que tampoco tuvo acción este fin de semana, le saca una luz de ventaja a Milton Casco. Lo quieren para que tape a Cristian Pavón, tal como pasó en el verano.
Ya en el medio, volverá Leo Ponzio después de dos partidos de descanso. Enzo Pérez podría jugar, pero su rendimiento frente a Patronato volvió a ser flojito y hay cierto porcentaje de incógnita. En tanto, Pity Martínez -jugó casi 30 minutos en Paraná- estará desde el arranque si Gallardo lo ve bien. Y el puesto restante lo dirimirán entre Nacho Fernández, De la Cruz y Quintero.
¿Arriba? Lucas Pratto, fresco, será la referencia en el área y, hoy por hoy, Rodrigo Mora está por delante de Nacho Scocco para acompañar al Oso.