Te Bancamos a Muerte Tomy!

Te bancamos Tomy!

Es imposible no detenerse a observar cada repetición de la jugada. Es que la acción causó tanta sorpresa como incertidumbre durante los últimos minutos del partido. Con el arco a su merced, tras el pase perfecto de Gonzalo Martínez ante la salida de Lucas Acosta, Tomás Andrade tenía todo servido en bandeja para marcar su primer gol oficial en Primera División.

Sin embargo, el volante no pudo celebrar. Un toque suave con el botín izquierdo fue insuficiente para vulnerar a un arquero rival de reacción extraordinaria. ¿Cómo ocurrió? ¿Andrade se encontró con una definición que pensaba inesperada por la posición en la que llegaba Sebastián Driussi para definir primero? Los interrogantes son muchos en torno a una posibilidad en zona de privilegio.

La reacción de Marcelo Gallardo, capturada por una cámara de TV, sirvió para leer sus labios. "¿Qué pasó?", preguntó el técnico, incrédulo. Es muy posible que la "panza" del campo de juego -el terreno no es liso porque debe facilitar el drenaje- le haya impedido ver con nitidez lo sucedido. Aunque recién después del partido pudo ver la repetición, el Muñeco se dio cuenta que Andrade estaba completamente dolido.

El joven de 20 años salió de la cancha entre lágrimas, shockeado, sin consuelo hasta que el DT mostró que no sólo es un ganador enorme como jugador y entrenador, sino también un ser humano sensible. Le dio un abrazo, habló con él y luego lo respaldó en la conferencia de prensa: "Estas cosas suceden y él tiene que tener tranquilidad. No va a ser ni el primero ni el último que le ocurra una cosa así".

No fue la primera vez que Gallardo tuvo un gesto así. En Estados Unidos, Matías Moya desperdició un penal en la serie frente al Sao Paulo. El chico lógicamente sintió un sinfín de sensaciones difíciles, aunque inmediatamente recibió el apoyo de un técnico que, además de generar orgullo por su capacidad gigante, siempre prioriza el respeto a una persona antes que la parte deportiva.