0

Así se juega la 20ª

Así se juega la 20ª


Se confirmaron los días, horarios y árbitros de la próxima fecha. Entrá y conocé qué le tocó a cada equipo. 













FECHA 20 DE PRIMERA

Viernes 14 de abril
19- Huracán vs. Arsenal Fernando/ Rapallini
21,15- Lanús vs. San Martín SJ/Fernando Echenique

Sábado 15
11- Newell's vs. Estudiantes /Fernando Espinoza
16- Belgrano vs. Talleres/ Facundo Tello
18- Independiente vs. A. Rafaela/ Néstor Pitana
19- Olimpo vs. Vélez/ Darío Herrera
20- Sarmiento vs. Racing /Patricio Loustau

Domingo 16
16- Godoy Cruz vs. Banfield /Diego Abal
16,15- A. Tucumán vs. San Lorenzo/ Mariano González
18,15- Boca vs. Patronato/ Germán Delfino
20,15- Tigre vs. River /Jorge Baliño
20,30- Unión vs. Defensa /Héctor Paletta

Lunes 17
19,00- Temperley vs. Rosario /Central Silvio Trucco

21,15- Gimnasia vs. Aldosivi/ Andrés Merlos
0

"Ya me siento a disposición"

"Ya me siento a disposición"


Lollo completó otros noventa minutos en Reserva y dijo que ahora depende de Gallardo tener una oportunidad en Primera. El cordobés quiere pelear por el puesto de segundo marcador central.
Luciano Lollo volvió a jugar en Reserva. El central completó noventa ante Quilmes (por cuarto partido consecutivo luego de haber jugado ante Unión en Primera en la reanudación del torneo) y tras el choque que se desarrolló en Ezeiza expresó sus sensaciones: "Vamos sumando minutos, intentando llegar al nivel que uno quiere. Siempre es positivo cuando uno puede jugar. Suma".
Lollo le había pedido a Gallardo bajar a Reserva para sumar ritmo luego de una actuación floja ante Unión. Y de ahí no paró, sumando minutos tras el parate sufrido en 2016 por la lesión sufrida en el quinto metatarsiano del pie izquierdo. 
En diálogo con Fox Sports, el cordobés ya se mostró con ganas de volver a Primera: "Uno labura para estar al cien por ciento. Es importante tener tranquilidad y de a poco me voy sintiendo mejor. A veces se hace difícil porque la paciencia se agota, pero hay que seguir trabajando. Yo ya me siento a disposición para estar. Depende de Marcelo (Gallardo) que lo disponga".

Con Maidana inamovible, Lollo pelea por el puesto de segundo marcador central, hoy en manos de Martínez Quarta. El pibe viene teniendo un buen nivel y no será fácil para el ex Racing. Además, están Gonzalo Montiel y Arturo Mina, aunque el ecuatoriano está relegado. ¿Podrá ir al banco ante Melgar por Copa o sumar minutos frente a Tigre por el torneo local?
0

Alario Es una bendición

Es una bendición


Alario está en boca de todos. Tras el elogio de Messi, Gallardo avisó: “Puede jugar en cualquier equipo del mundo”. En River esperan disfrutarlo más allá de junio...
Que está tocado por la varita mágica del gol no es ninguna novedad, pero ahora Lucas Alario sumó otro plus, muy cercano a lo sobrenatural: la bendición del barba. El barba del fútbol, obviamente, no el que buscan los fieles católicos en el cielo y le rezan en las iglesias. La bendición que recibió el goleador de River fue de Lionel Messi. Claro que el mayor acto de gracia, que podría calificarse de milagro, fue el que produjo el propio Alario cuando rechazó la millonaria oferta de China para seguir haciendo goles con la camiseta de la Banda y mantenerse cerca de la Selección. Y si de fieles hablamos, el mismísimo Marcelo Gallardo se declaró un devoto suyo con una declaración bíblica:“Alario puede ser el 9 de cualquier equipo del mundo, pero no me gusta decir esto ahora para que no se lo lleven, ja. Y si sostiene este nivel durante todo el año, tendrá muchas chances de llegar al Mundial”.Amén.
El Pipa es un delantero distinto, de un valor incalculable para el equipo de MG. Sus goles son su principal virtud, sobre todo por esa condición innata de meterla en los partidos decisivos. Pero su permanente evolución, con apenas 24 años, excede a sus cualidades para definir con cualquiera de los dos perfiles o de cabeza. Hoy el santafesino es un 9 completo, capaz de retrasarse para armar juego con los volantes creativos o penetrar en el área rival con alguna acción individual.
El potencial del Pipa no tiene techo, pese a que sus estadísticas están en la cima a nivel mundial. Su promedio de gol en River es de 0,56: convirtió 35 veces en 62 partidos. Impresionante. En el torneo local lleva nueve gritos y en la Copa, uno. Otro aspecto que lo distingue es que carece del egoísmo típico de los goleadores y por eso su sociedad con Driussi (o con Mora o Alonso) funciona de pelos. Detalles que no se le escapan al mejor jugador del mundo.
Es lógico que esas virtudes despierten el interés de los clubes poderosos de Europa, como ya pasó con el PSG y ahora sucede con la Lazio. Si algún equipo poderoso avanza para concretar la compra de Alario en junio, esta vez a River le va a resultar casi imposible retenerlo. Primero, porque deportivamente sería un desafío muy importante para el Pipa, todo lo contrario a lo que sucedió en el verano con la oferta del fútbol chino. Además, porque al decidir quedarse en Núñez, su manager Pedro Aldave acordó -de palabra- con los dirigentes de River una mayor flexibilidad económica para una transferencia a mitad de año: o sea, si la oferta es inferior a los 18 millones de euros de la cláusula de rescisión. Mientras, Gallardo y los hinchas disfrutan los goles de Alario.
Una bendición.


0

"La Selección es un sueño, pero no me iría ahora”

"La Selección es un sueño, pero no me iría ahora”


Consciente de que Argentina está en busca de un entrenador, Marcelo Gallardo advirtió que de ninguna manera tiene pensado irse del Millonario y aclaró que cumplirá con su contrato. Además, ponderó a Lucas Alario: "Puede ser el 9 de cualquier equipo del mundo".
La situación de la Albiceleste es compleja. Con la reciente asunción de Claudio "Chiqui" Tapia en la Asociación del Fútbol Argentino, el primer cambio que se avecina es el de director técnico. Debido a los malos resultados que sacó Edgardo Bauza, y a la necesidad de sumar puntos en las Eliminatorias, la idea es renovarse con un nuevo conductor.
Uno de los apuntados por la mencionada entidad es Gallardo, quien en más de dos años y medio ganó seis títulos oficiales con el Más Grande. Aun así, y a pesar de que esta posibilidad es muy tentadora, no tiene pensado marcharse de la institución.
"La Selección es un sueño, pero no me iría ahora. Es el escalón máximo que un entrenador puede aspirar, pero yo soy muy respetuoso. He escuchado algunas versiones. Yo soy muy respetuoso, a veces no quiero decir nada para que no me involucren de alguna manera. He escuchado algunas versiones. Por una cuestión de respeto hacia los que están, hacia los que yo tengo el deber de cumplir mi palabra y mi contrato. Hasta fin de año dije que iba a cumplir y eso yo ya lo manifesté", señaló el Muñeco en una entrevista que le concedió a Fox Sports Radio.
A su vez, el entrenador de 41 años se refirió al gran momento que está pasando el Pipa, autor de un doblete en el triunfo por 2-0 ante Quilmes: "Alario puede ser el 9 de cualquier equipo del mundo. Es un jugador de selección. No sé a partir de cuándo le tocará jugar. Cuando empiece a jugar va a ser difícil que le toque salir. Deberá rendir lo que a nosotros nos ha rendido. Hoy está bien y en una buena edad, con una muy buena cabeza, mucha confianza. No es fácil ser el 9 de un equipo grande como River. Ha mostrado cualidades suficientes para merecer estar donde está".
Gallardo sabe que al Pipa lo siguen varios clubes importantes de Europa. Sin embargo, resaltó que si el delantero sigue jugando de esta manera y se queda en Núñez, tendrá más chances de ir al Mundial de Rusia 2018.

"Para mí, Alario sosteniéndose con este nivel en River durante todo el año va a tener muchas chances de llegar al Mundial con muchas posibilidades. Si se va en junio a otro equipo o a donde sea va a sufrir el cambio y la adaptación. Y en todo ese proceso pierde esa dinámica que está teniendo y que puede llegar acá. Hasta el Mundial, si es que sigue evolucionando como lo viene haciendo y si lo tenemos nosotros va a tener muchas chances", manifestó el Muñeco.
0

Mora, la cara del cambio...

      Mora, la cara del cambio...


El ingreso del uruguayo, otra vez, fue determinante: en los 20’ que jugó, participó en los dos goles. Un revulsivo para un equipo que, sin él en cancha, no podía meterla.
U-ru-guayo/u-ru-guayo”. La ovación de un público que sabe apreciar lo bueno bajó instantánea. Apenas se consumó el primer gol de Alario, los enfocados hinchas no se detuvieron en el goleador y ni siquiera en el que dio la asistencia. Celebraron, como se debía, la prepotencia de Rodrigo Mora para robarle la pelota a Orihuela, encararlo y sacar el centro que le sacudió la modorra a un River que otra vez, como el domingo pasado, tuvo que esperar el ingreso del uruguayo para definir el partido.
El más titular de los suplentes, el Pulga tranquilamente podría ser parte de la formación inicial por el nivel que viene demostrando. Si no está entre los 11 es sólo porque delante suyo tiene a dos “animales”, como él mismo se encargó de definir a Alario y Driussi. De otro modo, Gallardo no podría justificar el hecho de tenerlo la mayor parte del partido en el banco. Al contrario, el Muñeco no precisa argumentar por qué lo pone. Eso salta a la vista en el puñado de minutos que el uruguayo está en cancha. Apenas veintipico, tanto en Mendoza como en Núñez, le alcanzaron para revelarse como el revulsivo que el equipo necesita para torcer historias que -sin su determinante influencia- pudieron haberle costado puntos a River. “Pudimos encontrar el gol con un muy buen centro de Rodrigo, que entró bien otra vez”, lo elogió el DT con una particularidad: el de Mora fue el único nombre propio que pronunció en la conferencia posterior al 2-0 ante Quilmes sin que le consultaran. Y el yorugua se lo ganó por la lucidez que demuestra cada vez que se lo necesita. Cuando dice que “en los minutos que el equipo precise de mí voy a tratar de dar lo mejor”, el 7 bravo no apela a una frase de compromiso. Que sus palabras se trasladen a los hechos enamora a la tribuna tanto como su humildad para asumir el rol que le toca siendo uno de los cuatro jugadores (junto con Maidana, Ponzio y Driussi) que dio todas las vueltas olímpicas en este ciclo. Y si contra Godoy Cruz los tres puntos habían sido suyos, anoche la cara del cambio ganó dos y medio. Porque además de la jugada previa al 1-0, el “u-ru-guayo, u-ru-guayo” también fue clave en activar la contra que terminó en el segundo.


0

Para la cervecita nomás

Para la cervecita nomás


Las expectativas eran muy grandes. Pero el rival trabajó el partido y lo complicó todo lo que pudo. Eso es lo lindo del fútbol argentino: cualquiera plantea dificultades. Y cuando no da para el champagne, una cervecita para el brindis también va.

Veníamos con el entusiasmo muy arriba y tal vez por eso las expectativas eran grandes. Queríamos ver a River mostrar el fútbol que viene jugando y tanto nos gusta. A veces estos partidos son los más difíciles. Nos costó una media horita más o menos meternos en el juego y de no haber sido por alguna falla en la definición de ellos, algún cierre desesperado y hasta por Batalla se nos pudo haber complicado todavía más. Tuvimos, como para alimentar las ilusiones, la intención de la asociación, esa idea de ir escalando en la cancha con triangulaciones que estéticamente son de fútbol europeo y que se pueden ver más cuando el césped acompaña como acompañó ayer pese a la lluvia (notable mejoría en ese aspecto). No estuvo fino Pity esta vez (para anotar, se fue aplaudido), jugó demasiado retrasado Nacho, casi partiendo como un cuatro zurdo que se tira hacia adentro, cosa que no parece tener mucho sentido cuando el rival te espera en la puerta de su área con ocho jugadores: los que más saben tienen que hacer la diferencia allá arriba y no en campo nuestro. Rojas siempre criterioso, el más. Los laterales bajos otra vez y hasta Martínez Quarta arriesgando de más en algún cruce. Cuando nos acomodamos daba la sensación que el gol llegaba en cualquier momento pero no llegaba nunca y corríamos el riesgo de entrar en la desesperación de los minutos finales, esa que no te deja pensar bien la jugada. El Muñeco apeló a Mora y Morita, con esa fe que lo caracteriza, nos dio el impulso para ganar el partido con los dos goles de Alario, el segundo una joya del contraataque. Y listo. Era importante ganar. El equipo mantuvo la propuesta, aunque esta vez no tuvo brillo. Lógicamente, el rival trabajó el partido y lo complicó todo lo que pudo. Eso es lo lindo del fútbol argentino: cualquiera plantea dificultades. Y cuando no da para el champagne, una cervecita para el brindis también va.
0

Martínez Quarta, En el segundo se vio otro River y gracias a Dios pudimos conseguir la victoria

En el segundo se vio otro River y gracias a Dios pudimos conseguir la victoria


Lucas Martínez Quarta dejó en claro que River hizo un gran papel en la segunda parte y que el resultado fue justo. Además, explicó que no tiene asegurado el puesto y que debe seguir trabajando para mantenerse en el primer equipo.
La Banda no se da por vencido en el torneo doméstico y sigue luchando para tratar de alcanzar al puntero (Boca). Este domingo tuvo un partido duro en el Monumental. Se enfrentó a Quilmes, que en la primera parte le generó algunos contragolpes peligrosos, pero luego hizo un muy buen segundo tiempo y encontró el triunfo con un doblete de Lucas Alario.
Tras el encuentro, el zaguero central analizó el papel que protagonizó el Millonario y expresó: "Fue un primer tiempo difícil, en el segundo se vio otro River y gracias a Dios pudimos conseguir la victoria. La cancha estaba un poco pesada, pero gracias a Dios se pudieron conseguir los tres puntos".
"Se cerraron bien atrás, nos costó entrar un poco, pero en el segundo tiempo se vio otro River. Gracias a las individualidades se pudo sacar adelante", añadió el joven surgido de las Divisiones Inferiores del Más Grande.
A su vez, Martínez Quarta resaltó las apariciones de Rodrigo Mora, Sebastián Driussi y Lucas Alario, quienes fueron fundamentales para convertirle al Cervecero: "Sabemos que tenemos jugadores individuales que pueden hacer la diferencia. Hoy creo que sucedió eso". Y agregó: "Hace varios partidos se ve un equipo diferente que sale a jugar cada partido y que trata de no dejar puntos atrás".
Por otro lado, el juvenil de 20 años se refirió a su gran presente en el primer equipo y advirtió que se siente más seguro: "Es partido a partido, me siento con otra confianza, con varios partidos encima. Hay que seguir entrenando y seguir mejorando". Y avisó: "No sé si me he ganado un puesto, pero trabajo día a día para poder estar en cada partido".
Consciente de que Boca es el puntero del certamen, el defensor dijo que River sólo debe estar pendiente de los próximos compromisos que tiene por delante: "Tenemos que hacer nuestro trabajo partido a partido, sacar los tres puntos cada partido y esperar a que pierdan puntos. Ahora nos toca Melgar (por Copa Libertadores) y tenemos que seguir cosechando puntos para tratar de alcanzar la punta del torneo".


0

segundo gol contra Quilmes


0

Primer gol contra Quilmes


1

Jugador x jugador contra Quilmes

Jugador x jugador contra Quilmes


El puntaje de cada jugador de River Plate, según el rendimiento que tuvo en el encuentro ante Quilmes, correspondiente a la decimonovena fecha del Campeonato Argentino 2016/2017.
Augusto Batalla (7): Debió intervenir poco pero resolvió sin problemas un par de remates de Quilmes. Gran tapada a Andrada y bien con los pies.
Jorge Moreira (4,5): Muy endeble en la marca, otorgando muchos espacios. Se proyectó constantemente, pero resolvió casi siempre mal.
Jonatan Maidana (6): De menor a mayor. Comenzó con algunas fallas, pero se fue asentando y terminó ofreciendo un par de quites interesantes.
Lucas Martínez Quarta (5): No tuvo un buen partido. Fue frágil en la marca y perdió pelotas en zonas complejas por querer salir jugando siempre.
Milton Casco (5): Al igual que Moreira, sufrió en defensa y se mostró como opción en ataque de forma repetida. También culminó mal sus intervenciones.
Gonzalo Martínez (6): Intentó desequilibrar por derecha e izquierda, pero no lo logró como en partidos anteriores. Por momentos se asoció de buena forma con Fernández.
Leonardo Ponzio (6): Interesante despliegue y aceptable en la contención. No se mostró del todo preciso en la distribución de juego.
Ignacio Fernández (7): El dueño de la pelota en cada acción de ataque de River. En el primer tiempo realizó un gran desgaste, apareciendo por todo el frente ofensivo. Se diluyó un poco en el segundo período.
Ariel Rojas (6): Otro que no tuvo su mejor rendimiento, pero, por momentos, fue importante en la circulación de juego. Le costó encontrar continuidad.
Sebastián Driussi (6): Tras 70 minutos para el olvido, terminó siendo determinante para River. Le bajó la pelota a Alario en el primer gol y fue clave en el contragolpe que culminó con la segunda conquista.
Lucas Alario (7,5): A pesar de pelear, no venía teniendo su mejor actuación. Sin embargo, abrió la cuenta aprovechando su buena ubicación y liquidó la historia con una interesante definición.

Ingresaron:
Rodrigo Mora (7): Buen ingreso del uruguayo, que envió un centro punzante en el primer gol y comandó una réplica letal en el segundo tanto.
Exequiel Palacios (-): Escasos minutos en el campo de juego.

Camilo Mayada (-): Ingresó en el final del partido.
0

Un River ambicioso y ganador

Un River ambicioso y ganador


Cuando el partido se ponía difícil para abrir la cuenta, Gallardo supo hacer el cambio indicado con la inclusión de Mora, clave para encabezar los avances en ambos goles de Alario. Gracias a la búsqueda incesante, el Millonario se impuso 2-0 sobre Quilmes y sigue entre los primeros cinco del torneo local.
La misión es difícil. Sin embargo, River no se baja de la pelea. Sueña con arrasar en todos los planos. De buen comienzo en la Copa Libertadores, también se levantó en el campeonato doméstico. Entre los dos certámenes reúne cinco victorias consecutivas y continúa alimentando las posibilidades de llegar a las últimas jornadas del torneo con chances de dar batalla. Por lo pronto, hoy hizo su parte porque se impuso 2-0 frente a un Quilmes más duro de lo que se presumía en los papeles, teniendo en cuenta su grave presente deportivo, comprometido en la tabla de posiciones y con DT interino.
La ambición de un equipo con mentalidad ganadora y momentos de muy buen fútbol doblegó a la resistencia del Cervecero, cuyas ganas fueron superiores a sus limitaciones durante un tramo importante de la tarde noche. River ganó porque jamás renunció a su búsqueda ni el camino que desarrolla desde que empezó la competencia oficial de este año. El Millonario sabe que casi siempre la responsabilidad es suya, que pocas veces los rivales saldrán a jugarle de igual a igual. Entonces debe hallar variantes para lastimar a adversarios más preparados para recortar espacios que dedicados a pelearle el protagonismo a La Banda.
Bajo la lluvia y con un campo que respondió bastante bien, de acuerdo al contexto, River tuvo la paciencia suficiente y las herramientas futbolísticas para quedarse el triunfo. Costó muchísimo. De hecho, al principio Quilmes amenazó seriamente con ponerse en ventaja a través de un Federico Andrada inquietante, capaz de abastecer en ataque y ocasionar peligro. Al Millonario se le hizo difícil ejercer un dominio nítido, aunque lo consiguió después de la media hora inicial, momento en el que remató por primera vez. Una demora impensada, pero que de ninguna forma alteró los planes.
Desde el último cuarto de hora en la primera etapa hasta el final del partido, fue un monólogo de River. El circuito ofensivo creció cuando Ignacio Fernández y Ariel Rojas, cuya precisión de primera fue para destacar, entraron en acción con mayor frecuencia. El equipo se fortaleció poco a poco, movió la pelota de un lado hacia el otro, abriendo la cancha y profundizando para encontrar el hueco que le permitiera desnivelar. Fue complicado porque Quilmes entendió cómo cubrirse, replegándose con atención e inteligencia, sumando a los volantes para custodiar el área y sus cercanías.
Sin embargo, River tuvo su premio. No le cayó del cielo como si se tratara de lluvia, sino que fue como consecuencia de la convicción para llevar a cabo una premisa de juego e incluso mejorarla mediante cambios. Ahí fue determinante la lectura de Marcelo Gallardo. Una vez más, el Muñeco interpretó qué convenía. Relegó a Milton Casco para romper el 4-4-2 y transformarlo en un 4-1-2-3. Rojas pasó a ser lateral izquierdo, mientras que Rodrigo Mora ingresó como extremo derecho.
El uruguayo, perseverante como pocos para luchar por cada balón, causó un error ajeno, envió un centro desde la derecha y logró que Sebastián Driussi, de cabeza, asistiera a Lucas Alario. A los 26 minutos del segundo tiempo, River rompió el cero que tanta preocupación generaba. El propio Pipa, imparable durante todo el complemento, sentenció la historia a cuatro de los 90 reglamentarios, debido a que definió con un remate esquinado, tras otro pase de Driussi. Creer o reventar, dadas las circunstancias, fue luego de un contragolpe que encabezó Mora. Así, por ambición y mentalidad ganadora, El Más Grande venció 2-0 al Cervecero y sigue quinto, con la esperanza de soñar por el título en el torneo local.


0

El Muñeco es un mago

El Muñeco es un mago


Gallardo agarró la varita táctica y apostó fuerte en un momento crucial: bancó a Driussi cuando no estaba completando un buen partido para meter a Mora y los dos fueron decisivos en los goles de Alario. Todo un espectáculo estratégico.
Que Gallardo tiene muñeca, valga el juego de palabras con su apodo, no es una novedad. Más bien, es una constante de uno de los grandes técnicos que tiene el fútbol argentino y con enorme proyección pensando a futuro, más allá de lo que ya ha logrado en River. Y tal como había pasado hace una semana en Mendoza vs. Godoy Cruz, cambiando a los delanteros titulares (Driussi y Alario) por los suplentes (Mora y Alonso) en pleno segundo tiempo, hoy otra vez metió un shock desde sus decisiones tácticas. La varita del DT tiene su efecto.
River no podía quebrar a Quilmes en el Monumental y el DT se la jugó. De esos cambios audaces, como el recordado "Pezzella de nueve en un Súper contra Boca", Gallardo apostó sacando un lateral como Casco para poner a un mediapunta como Mora, otra vez encendido y picante. Por si fuera poco, bancó al goleador Driussi, que no venía teniendo un partido positivo, y la cuenta le salió redonda. No hizo la lógica y apostó en la mesa. Comprensible, teniendo en cuenta la necesidad de ganar o ganar del Millo para seguir prendido en el torneo.
Con Rojas algo más retrasado en la izquierda, Nacho continuando como principal pasador, el Pity Martínez moviéndose otra vez a la izquierda (empezó por derecha), Mora por la mencionada banda derecha y Driussi y Alario bien de área; River tuvo un amplio abanico de posibilidades ofensivas ante un Quilmes dedicado a aguantar. Jugado, con un esquema distinta al que inició el partido.

Lo craneado por Gallardo salió a la perfección, porque Mora fue quien inicio la jugada del primer y segundo gol al correr y luchar por la pelota; Driussi se encargó de asistir (de cabeza y con el pie) al propio Alario, implacable como es habitual. Una idea redondita, como un truco de magia perfecto. Y una varita implacable como la del mago que tiene Núñez en su banco de suplentes.
0

"River demuestra a qué quiere jugar"

"River demuestra a qué quiere jugar"


Gallardo se fue conforme con el rendimiento del Millo, especialmente en el segundo tiempo, y con una idea que sigue creciendo en base a resultados y funcionamiento.
"En el primer tiempo fue parejo, más allá del porcentaje de pelota que tuvimos. Los primeros 25/30 minutos fueron ataque por ataque. Quilmes retrocedía y atacaba, creando peligro. Y nosotros no le encontramos del todo la vuelta en el PT. En el segundo controlamos mejor, no le dimos la posibilidad del golpe por golpe y en la búsqueda de intentar y seguir, encontramos el gol con un buen centro de Rodrigo (Mora), que entró bien otra vez. Fue duro, partido difícil en una cancha pesada. Es bueno seguir ganando". Claro y concreto como es habitual, así analizó Marcelo Gallardo lo que fue el triunfo de River por 2-0 frente a Quilmes en el Monumental. A continuación, lo que además dijo el DT en conferencia de prensa.
GENERAR Y CONVERTIR: "Dije en su momento que me preocupaba si el funcionamiento no estaba. Ahora que tenemos funcionamiento, hay que concretar lo que generamos y no sufrir. Ser decisivos. Seguimos en la búsqueda.
CONTROL DE BALÓN Y MENOS FALTAS: "Tenemos mucho el control de pelota y juego. No estamos corriendo detrás de la pelota, que es normal cometiendo faltas. Es alarmante para bien. Pero creo que en el partido anterior cometimos dos faltas. Vamos en busca del fair play, ja".
LA PACIENCIA DEL EQUIPO: "Eso habla de la templanza del equipo. De no poder convertir y que la gente acompañe y vea que el equipo busca y va. Es difícil porque el hincha ante la necesidad, tiende a confundir y ahí podemos equivocar los caminos. En un momento nos tocó ser confusos, de ir ganando antes de empezar a jugar. Estamos en un momento de inteligencia, de no desesperarse. De buscar sin volvernos locos. No tenemos que permitir que eso nos pase factura, que nos lleguen poco y nos conviertan. La idea es que no te conviertan cuando pasa eso".
MÁS DEL PARTIDO VS. QUILMES: "Estaba convencido que no iba a ser un partido sencillo. Cuando los rivales juegan contra River, se potencian. Siempre hay un partido que podés salir adelante. Quilmes no venía bien. Era tal vez el partido que querían jugar. Jugaron con mucho entusiasmo y nos podrían haber hecho un gol. Fue duro. En la búsqueda y ser prolijos e ir hacia adelante, íbamos a tener premio. Es bueno no desesperarnos".
LA IDEA: "Desde la pretemporada, uno elabora una propuesta pensando que puede jugar de esa manera. Nos retrasó el reinicio del torneo. Los partidos amistosos son para hacer pruebas. Empezás a ver las sociedades, dónde estás parado y le buscás la vuelta al funcionamiento. Y hoy tenemos la oportunidad de jugar y que el equipo se hay encontrado, con una propuesta interesante y los jugadores se ven reflejados. Demuestra y sabe a qué quiere jugar. No es fácil conseguirlo. Hay muchas formas de jugar y son respetables. River muestra seguridad desde lo que propone y lo trata plasmar. Esperamos seguir así".
¿RECAMBIO PARA LO QUE VIENE? "Vamos a ver. Intentaremos recuperarnos bien estos días antes de jugar por Copa y ver si tenemos la chance contra Tigre el lunes o martes. Está pedido. Vamos a ver si tenemos la posibilidad. Veremos cuál es el tiempo que nos dan. En mayo veremos, con un mes cargado de partidos. Vamos encarando en base a cómo terminamos. Los esfuerzos tienen que ser justos".
LOS APLAUSOS A MARTÍNEZ: "Es bueno la reconciliación del jugador con el hincha y el hincha con el jugador. Es bueno que suceda. El Pity cumplió y la gente lo reconoció. Nos hace bien como equipo que suceda eso".


0

Con la Pipa encendida

Con la Pipa encendida


River no la tenía fácil ante Quilmes hasta que apareció Alario y, con un doblete, le dio la victoria por 2-0. El Millo de Gallardo dejó en claro que no se quiere bajar de la lucha por el campeonato.

El resultado esta vez no es el fiel reflejo del trámite del partido. El 2-0 evidencia tranquilidad pero River estuvo lejos de eso ante Quilmes. El Millo de Gallardo tuvo que batallar de lo lindo para ir debilitando a un Cervecero que se plantó en el Monumental y encontró la victoria en un doblete de Lucas Alario, quien estuvo intratable en el segundo tiempo.
De arranque Quilmes marcó que no se iba a meter atrás y apostó sus fichas a los desbordes del rapidito Andrada. Con el correr de los minutos River fue acomodándose en la cancha pero las imprecisiones y la falta de puntería lo limitaban a no salir del incómodo 0-0.
Segundo tiempo, más presión y un cambio clave: adentro Mora y afuera Casco, para quemar las naves. Y el uruguayo terminó siendo determinante, gestando el centro que luego bajó Driussi y definió Alario para el 1-0. Ahí Quilmes perdió su coraza y se desarmó por completo. Aprovechó el local y nuevamente el Pipa se encargó de poner el segundo y definitivo.
Fue una victoria clave pensando en no descuidar el campeonato local, materia en la que River todavía debe seguir creciendo. Con la Pipa encendida, ganó, demostró contundencia y pegó en los momentos justos para un triunfo importantísimo. La moral está bien arriba y ya se puede pensar en el cruce del jueves por Copa ante Melgar. 
0

La previa del encuentro contra Quilmes

La previa del encuentro contra Quilmes


Por la decimonovena fecha del Campeonato Argentino 2016/2017, River recibirá a Quilmes en el Monumental. La Página Millonaria hace un repaso histórico de este duelo y analiza todos los números.
Este historial no ofrece demasiadas sorpresas, ya que refleja una nueva superioridad de River sobre su rival. Por el certamen doméstico, estos dos equipos se vieron las caras en 66 oportunidades, con 39 triunfos y 143 goles para el Millonario, 10 victorias con 72 anotaciones para el Cervecero y 17 igualdades.
Por otra parte, River acumula seis encuentros sin caer derrotado ante Quilmes, con tres victorias y tres empates. La última derrota tuvo lugar en el Torneo Inicial 2012, como visitante, por 1-0. Como local, La Banda no es superada por este rival desde el Torneo Nacional 1982, por 3-2.

DATOS COMPLEMENTARIOS

*Máximas goleadas de River Plate:
Campeonato 1937: River Plate 6 Quilmes 1
Final 2014: River Plate 5 Quilmes 0

*Máxima goleada de Quilmes:
Campeonato 1950: River Plate 1 Quilmes 4

*Últimos 5 partidos por el torneo local:
Inicial 2013: Quilmes 1 River Plate 1 (Carlos Carbonero)
Final 2014: River Plate 5 (Fernando Cavenaghi-2-, Gabriel Mercado, Cristian Ledesma y Teófilo Gutiérrez) Quilmes 0
Transición 2014: Quilmes 0 River Plate 1 (Carlos Sánchez)
Campeonato 2015: River Plate 2 (Teófilo Gutiérrez y Leonardo Ponzio) Quilmes 2
Transición 2016: River Plate 5 (Rodrigo Mora-2-, Gonzalo Martínez-2- y Lucas Alario) Quilmes 1

*Equipo de 11 con las dos camisetas:

Ubaldo Matildo Fillol; Nelson Vivas, Danilo Gerlo, Eduardo Tuzzio, Carlos Arano; Emilio Commisso, Matías Almeyda, Omar Labruna, Diego Buonanotte; Oscar Más y Alejandro Domínguez.
0

“Va a ser durísimo”

“Va a ser durísimo”


Federico Andrada vuelve a ese Monumental que lo vio crecer. Los recuerdos, las figuras rivales y las urgencias de este Quilmes.
Es una de las esperanzas de Quilmes, que debe pagar 50 mil pesos para que esté en el Monumental, ese estadio que conoce desde purrete. Federico Andrada vivirá un domingo especial. “Hice toda mi vida ahí, desde chico. Jugaba con Kaprof, con Ocampos y muchos jugadores que hoy están afuera. Tengo muchos conocidos y les tengo un gran cariño a varios. Por eso es algo lindo y una alegría volver al Monumental”.
-Conocés el estilo River: ¿cómo deben plantearle el partido ustedes?
-Hoy en día, River se afianzó más y tiene una base de juego que les está dando resultados. Yo trabajé esa base, la conozco y está rindiendo mucho. Por eso tendremos que tener cuidado porque todos manejan bien la pelota. Va a ser durísimo y debemos estar bien metidos, con mucha inteligencia para manejar los tiempos y las que tengamos, sean pocas o muchas, tienen que ir adentro para tratar de lastimarlos.
-De los que compartiste plantel en River, ¿cuáles son los pilares?
-Tiene muchas figuras como Maidana y Ponzio, que lideran el equipo y manejan todo. Y ni hablar de los delanteros: Driussi también daba sus primeros pasos en River en el mismo momento que yo.
-¿Soñás con volver?
-Y... Son muchos recuerdos. Salí campeón en el 2014 de la Recopa y el campeonato con Ramón Díaz junto a varios de estos chicos.
-¿Cómo llegan luego de los malos resultados?
-Es complicado porque perdimos cuatro partidos seguidos y no podemos afianzarnos. Con Central y Racing desperdiciamos puntos, se nos escaparon los partidos. Ahora tenemos un duelo muy complicado en una cancha difícil y tendremos que ir a luchar para sacar algún punto. Aún quedan 12 fechas y debemos hacer el mayor esfuerzo para quedarnos.
-¿Cómo tomaron la renuncia de Grelak?
-Para mí fue un golpe duro porque era un técnico que lo tenía hace ya un año, él me trajo a Quilmes y me brindó confianza.
-¿Sintieron responsabilidad por su salida?
-Siempre que se va un técnico, creo que la responsabilidad es de los jugadores. Nos sentimos mal porque desde los resultados no pudimos ayudar a Alfredo.
-¿Y a Cristian Díaz ya lo conocés?

-Me llamó para ir a Olimpo pero opté por quedarme en Quilmes. Me habló bien y me gustó la idea de juego que tiene, así que espero que pueda aportar lo mejor para que nos salvemos del descenso y para que Quilmes esté donde tiene que estar, en Primera.
0

El niño bonito

El niño bonito


River lleva 15 años sin tener al goleador del torneo y Driussi quiere cortar la racha: es el máximo artillero del equipo y hoy va por más.
Dicen que cuando estás enfocado, cuando tenés entre ceja y ceja un objetivo claro y confiás profundamente en que vas a lograrlo, el universo se encarga de hacer el resto.
Sebastián Driussi puede ser un caso ejemplar para aseverar que la Ley de la Atracción no es sólo una cuestión filosófica sino que se puede reflejar en la realidad. Con hechos, con situaciones de la vida cotidiana. Porque seguramente en otro momento de su vida, todavía cuando no lograba hacer pie en River y era moneda de cambio en cada libro de pases, ese cachetazo de derecha que ensayó en el partido con Belgrano hubiese dado en el poste, el rebote le habría pegado en la trompa y luego la pelota se habría ido mansita al saque de arco. De ninguna manera hubiese pasado lo que pasó: poste, espalda del arquero y adentro. Un grito de carambola que muchos se lo adjudican en su cuenta personal ( Olé se lo dio en contra a Lucas Acosta) basados en que el mérito fue todo suyo. En fin, lo cierto es que el Gordo la metió porque come protones... Está de racha e irradia cargas positivas por todos lados: con 10 tantos es uno de los máximos artilleros del torneo y se permite soñar con cortar una sequía de 15 años que acarrea River sin tener en sus filas al goleador de un campeonato. ¿El último? Un tal Fernando Cavenaghi. Sí, buscará ser el niño bonito.
“Si hago las cosas bien será un beneficio para el equipo. Esa es la tarea que tenemos los delanteros, no otra”. Después de haberla remado tanto, es entendible que este joven de 21 años ya no piense como un pibe de Inferiores. De hecho, ya mostró su temperamento y personalidad cuando a mediados del año pasado desechó las chances de irse a préstamo a Huracán o Vélez porque en su cabeza tenía las cosas claras. Sabía lo que quería. Por eso hoy analiza el contexto y se ubica en un lugar en el que los flashes no lo encandilan (desde Europa lo están enfocando...). Al contrario, tiene la capacidad de ver con claridad y encauzar toda su energía en pos de un objetivo grupal por sobre lo personal. Y esta tarde ante Quilmes no será la excepción, porque intentará aportar lo suyo -goles- para que River sume la cuarta victoria consecutiva en el torneo y se siga acercando a lo que todos buscan: hacérsela difícil a Boca. Y también al resto de los que pujan por un lugar en la próxima Copa.
Por eso Gallardo pone el 11 que más lo identifica y evita apelar a la rotación. En definitiva, el Muñeco también piensa en atraer las buenas vibras.

El secreto de River...
0

Se posterga el partido en Tucumán?

Se posterga el partido en Tucumán?


River debería visitar al Decano el fin de semana del 30 de abril, pero los compromisos coperos de ambos equipos forzarían una reprogramación.
River recibirá este domingo a Quilmes. Luego enfrentará el jueves a Melgar por Copa Libertadores, a Tigre en Victoria (16 de abril), a Sarmiento en el Monumental (sábado 22 o domingo 23) y visitará a Emelec en Guayaquil el jueves 27. El calendario marca que tras el viaje a Ecuador, debería enfrentarse a Atlético Tucumán en condición de visitante, pero todo hace indicar que ese partido se jugará más adelante.
¿La razón? Los compromisos de Copa Libertadores de ambos equipos. Así lo explicó Pablo Lavallén, entrenador del conjunto tucumano: "Esa semana jugamos la vuelta con Wilstermann (el martes 25 de abril) y luego con Peñarol (martes 2 de mayo). Lo ideal sería jugar contra ellos el sábado 29, pero tienen partido por Copa el jueves 27 (ante Emelec, en Ecuador). Lo más probable es que se postergue esa fecha, nos beneficiaría a los dos".
El sábado no se podría jugar porque River habrá jugado solo dos días antes y el domingo tampoco porque Atlético se medirá con Peñarol el martes siguiente. Beneficiándose ambos clubes, no hay razón para pensar que no se suspenderá el encuentro
0

¿Choca los cinco?

¿Choca los cinco?

River quiere seguir extendiendo su racha positiva y en Olé te contamos cuándo fue la última vez por torneos oficiales que ganó cinco partidos al hilo. ¿Repetirá?
El River de Marcelo Gallardo no se quiere bajar de la lucha por el torneo, pese a estar a ocho puntos de la punta. Y este domingo irá ante Quilmes de local por una nueva victoria para tratar de arrimarse. A la par, tratará de igualar una marca que no se da desde 2014/2015 por partidos oficiales: ganar cinco partidos al hilo.
La última vez ocurrió entre el final de 2014 y el comienzo de 2015. En aquellos meses -sin contar los partidos de verano-, el Millo venció a Atlético Nacional por la final de la Copa Sudamericana (2-0), al propio Quilmes por el torneo local (1-0), a San Lorenzo en dos oportunidades (1-0 y 1-0 por Recopa) y a Sarmiento de Junín (por 4-1).


0

Así forma River

Así forma River


Gallardo confirmó este viernes qué formación piensa poner el domingo en el Monumental ante Quilmes. Acá, la data.
River tiene todo listo para el encuentro de este domingo a las 18.15 frente a Quilmes. Tanto es así que Marcelo Gallardo confirmó la formación titular a 48 horas del match. "De no tener ningún tipo de inconvenientes, jugará el mismo equipo que jugó en Mendoza. Veremos mañana -por el sábado- cómo terminamos el entrenamiento", avisó.
¿Cuál será el equipo? Augusto Batalla; Jorge Moreira, Jonatan Maidana, Martínez Quarta, Milton Casco; Gonzalo Martínez, Leonardo Ponzio, Ignacio Fernández, Ariel Rojas; Sebastián Driussi y Lucas Alario.
Más allá de que River jugará el jueves ante Melgar por la segunda fecha de su grupo en la Libertadores, Gallardo pondrá lo mejor que tiene. No se guarda nada porque cree que el campeonato está abierto.
Al cabo de tres triunfos seguidos, River (32 puntos) quedó a ocho unidades de Boca. "Es importante que sumemos para dar pelea", sostuvo el entrenador. "La idea es intentar mantenernos y seguir con este crecimiento futbolístico del equipo, consistente", dijo un Gallardo que, además, avisó que van a tratar de aprovechar las chances que le den los de arriba.
Además de los 11 titulares, Gallardo citó a Maximiliano Velazco, Camilo Mayada, Gonzalo Montiel, Exequiel Palacios, Rodrigo Mora, Carlos Auzqui e Iván Alonso